miércoles, 3 de junio de 2009

Hace 20 años....

Era madrugada y en Pekín nadie imaginaba que al pedir democracia tuvieras que pagar una letra pequeña. Este mundo de democracia en el que vivimos, sin haber realizado esfuerzo alguno, a otros le costó mucha sangre, algunas lágrimas y miedo; miedo por encima de todo.

Hablar de miedo es fácil cuando pulsas teclas, únicamente tienes que contar lo que se siente.
Vivir el miedo sólo está hecho para unos cuantos; el miedo te bloquea, el miedo te para, el miedo hace que quieras estar en cualquier otro sitio... pero éste se hace mucho más fuerte cuando durante la noche suenan teléfonos que piden palabras de consuelo, cuando la radio se convierte en un clavo ardiendo al que agarrarse y el periódico en vez de hablar del cambio o de un nuevo día te habla de que sobre tus calles descansan unos 3000 muertos.

Yo no puedo hablar del miedo, porque el miedo lo sintieron ellos.

Ellos; Todos menos él.

Tener valor es fácil cuando tu piel la cubre una armadura, cuando un escudo te protege, cuando pulsas un botón desde la distancia o cuando no tienes nada que perder.
Él únicamente tenía dos bolsas agarradas en sus manos y eso le bastó para plantarse en la Gran Avenida de la Paz Eterna de Pekín.

Frente a él, una hilera de poderosos tanques se aproximan, puede salir corriendo pero elige la opción de desafiar al enemigo con la mirada. Sólo los que tienen un as en la manga eligen este tipo de opciones; ellos, los locos o los protagonistas de las películas de cine. Él se planta sin saber que ocurrirá, lo único que tiene claro es que conseguirá frenarlos, tiene fe en que su mirada los detendrá.

El miedo es un sentimiento que se adueña de los hombres, pero esta vez había elegido otra víctima, esa mañana de Junio de 1989 el miedo fue caprichoso y se personificó en aquellos tanques, un metal que como si se fuera ablandando por dentro intentaba sortearlo al mismo tiempo que sus soldados dejaron de reir para finalmente detenerse.


El "Hombre sin miedo" eligió un camino sin balas, un camino que le hizo subir sobre esos tanques para hablar con los verdugos, sin saber que veinte años después, un blog perdido en un ricón de esto que llaman Internet, conocido como Amensia en el paladar se pondría a recordar su hazaña. Bendita amnesia, esa que viene a rememorar la gesta en la que un "Hombre sin miedo" conseguiría parar unos tanques pidiendo la democracia.
















.... Hoy se cuentan historias sobre la conversación que tuvo con los soldados. Algunos dicen que con valor dijo "Retrocedan, den la vuelta y dejen de matar a mi gente", otros dicen que fue fusilado a los diez días ya que puso en evidencia a todo un ejército.

Yo soy de los que creen esa teoría en la que consiguió escapar, se exilió y ahora vive en el anonimato. Yo soy de los que piensa que ahora cuenta esta batalla a su nieto, sentándolo en las rodillas mientras le enseña la portada polvorienta que habla de "El Rebelde Desconocido" que consiguió parar tanques con solo mirarlos durante la revuelta de la Plaza de Tiananmen.

Llámame iluso si quieres por creer esta historia, pero hoy me pareció ver al "Hombre sin Miedo" en el autobus, leyendo en el periódico un artículo sobre la democracia en nuestros días, mientras se le caían un par de lágrimas con sabor a nostalgia y orgullo.



PD.- La fotografía de Widener desde el hotel Beijing y la filmación del hombre en pie, se transmitió esa misma noche. Fue titular en cientos de periódicos y revistas, y el principal titular en muchos noticiarios alrededor del mundo.

PD2.- En abril de 1998, la revista estadounidense Time, incluyó al "Rebelde Desconocido" en su lista de las cien personas más influyentes del siglo XX.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola Carlos, que llevaba tiempo sin meterme por aquí y el día que me meto me encuentro esto...

Es la foto que más me gusta sin duda de las que hemos estudiado. Representa tantas cosas que pensé escribirle también un artículo, pero hasta que pasen los exámenes creo que se va a quedar aparcado. Espero que me permitas que ponga un enlace a este artículo en??

Bueno tío un abrazo y enhorabuena por esto, que hoy tengo la mente cansá y no estoy pa escribir mucho

Carlos Martín dijo...

Los amigos en este espacio tienen las puertas abiertas y el derecho de hacer y deshacer todo lo que quieran, así que un enlace siempre será bien recibido.

Ya va siendo hora de que esta amnesia en el paladar vaya acercando posturas con tú megáfono ;)

Un abrazo Crack y gracias por escribir.